jueves, 15 de enero de 2015

No volveré a ser joven

Que la vida iba en serio uno lo empieza a comprender más tarde ­ como todos los jóvenes, yo vine a llevarme la vida por delante. Dejar huella quería y marcharme entre aplausos ­ envejecer, morir, eran tan sólo las dimensiones del teatro. Pero ha pasado el tiempo y la verdad desagradable asoma: envejecer, morir, es el único argumento de la obra.